miércoles, 2 de febrero de 2011

No es por ti, es por mi.

Muertísima de sueño un miercoles a las doce de la noche después de un día horrible entre apuntes, ordenadores y bolígrafos que derraman tinta en tu boca porque sí. De cañas de chocolate a las dos de la tarde y de lentejas a las seis. De medicamentos para la garganta que se creen somníferos y de chocolatinas que en lugar de animarte te hunden, bajo el suelo, llevándote muy hondo, profundísimo.
Pensaréis, como yo también pienso, que por qué sigo aquí, contando pegoletes (amo esa palabra) en lugar de estar en la cama cerrando los ojos muy muy fuerte y deseando con toda el alma que este día acabe ya.
No es una entrada triunfal, de esas que escribes y, una vez acabadas, dibujas una sonrisa, exterior o interior, creyendo que has hecho algo reconfortante que gusta a los demás. Esta es una entrada que no os va a hacer quedar agusto a vosotros. No la he hecho por vosotros. La he hecho por mi. Sólo he pasado por aqui para soltar una cosita que tengo en mente que me va a hacer sentir mejor. Y es que sé que, cuando todo esto acabe, y a todo me refiero a exámenes, becas, agobios y caos, las cosas van a cambiar. Van a cambiar aquí. Van a cambiar en mi. Y van a cambiar mucho.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Buenos son siempre los cambios, no estar siempre en la triste monotonía del día a día aunque todos ellos corren el riesgo que se eche de menos, con el tiempo, lo que se ha cambiado.

En fin Sara, espero que los exámenes te estén yendo de la mejor manera posible, a mí se me ha atragantado ya uno aunque espero que me deje aprobarla antes de septiembre.

Un saludo =)

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Tiempo al tiempo...y paso a paso... ;D

un beso fuerte ...y dale duro a todo esto...para luego dedicarte a hacer pegoletes jejeje...